Desde tiempos ancestrales, la Costa Blanca ha sido un importante punto de intercambio comercial. Barcos cargados de productos llegaban a las poblaciones costeras y, tras vender sus mercancías, se marchaban repletas de alimentos, metales, artesanía y un sinfín de artículos de la máxima calidad provenientes de los pueblos próximos. A día de hoy, esa tradición aún se mantiene viva en los mercados y mercadillos de Altea.
En los mercadillos de Altea se ofrece la máxima calidad y una amplia variedad de productos. El sol del Mediterráneo, la tierra fértil y la humedad son los componentes perfectos para el desarrollo de la agricultura, que es uno de los símbolos representativos de la región.
Cuando caminas por los Mercadillos de Altea puedes observar frutas y verduras cultivadas en esta tierra. Su sabor es muy diferente a otras, ya que han sido maduradas al sol y recogidas en el punto óptimo. Los tomates, los pimientos, las berenjenas y otros vegetales típicos de la zona son perfectos para hacer en el horno, con un poco de aceite y sal mediterránea, por supuesto. Preparadas a la plancha o la brasa también son una delicia.
Otros productos riquísimos que puedes obtener de primera mano en el mercado son; el arroz, los encurtidos, los embutidos de Requena, el vino, los licores y la fruta fresca. Los dulces también tienen su lugar en algunos puestos.
Pero los vendedores no solo ofrecen alimentos. En algunos quioscos se exponen productos artesanales, tallados en madera o creados con barro y cocidos en hornos de cerámica. Otros son de metal y están trabajados con esmero.
El cuero y la piel en general también han formado parte de la industria mediterránea. Es estos mercados de Altea puedes encontrar calzado de la máxima calidad, hecho a mano, sumamente cómodo y con una duración excepcional.
Por último, encontrarás mucho tejido. Algunas de las fábricas textiles de los alrededores proveen a los comerciantes locales, que luego ofrecen en sus puestos prendas excelentes a muy buen precio. Una oportunidad perfecta para ahorrar sin renunciar a la calidad o el confort.
Si estás pasando unos días en la zona, te recomendamos que visites el mercado de Altea. Todas las semanas los vendedores montan sus puestos para ofrecer una amplia variedad de productos. Este evento tiene lugar todos los martes en la calle Ingeniero Muñoz y calles aledañas, de 8:00 a 14:00 horas. Puede que de manera puntual se cambie la ubicación para cumplir con las normas de seguridad recomendadas para controlar el COVID-19.
En la zona del Carrer de la Filarmónica encontrarás todos los productos de alimentación de los que te hemos hablado. Pero hay algo más que se ofrece en esta zona. Si eres amante de las flores y la botánica en general, encontrarás puestos con flores frescas, plantas semillas y herramientas de jardinería. En la primavera también hay algunos plantones de tomates, pimientos y otros vegetales para que tú mismo los puedas cultivar cuando regreses a tu casa.
En la zona del Camí del lAlgar está la parte de textil, donde encontrarás bolsos, objetos de cuero, sombreros y muchas otras cosas. También verás souvenirs y artículos artesanales, perfectos para llevarte un recuerdo o comprar un regalo a tus familiares y amigos.
En fechas especiales se celebran otros mercadillos en Altea que son de gran interés. Por ejemplo, durante el verano y también en la Semana Santa, se colocan puestos de artesanía en la Plaza de la Iglesia de Altea. En ellos puedes adquirir una amplia variedad de productos artesanales.
La madera, el barro, el metal o el cuero son transformados en abalorios, monederos, adornos y otros productos muy vistosos y originales. El entorno en el que se ubican los puestos convierten a estos mercadillos en una atracción especial, sobre todo si los visitas al atardecer.
Otro que no se puede pasar por alto es el mercado de Navidad. Coincidiendo con el Puente de la Constitución, se instala el mercadillo navideño de Altea. En él puedes encontrar muchos artículos artesanales de la zona. Es ideal para disfrutar del turismo de invierno en la población. En él se ofrece mucha artesanía y alimentos de la zona. Aunque predomina lo local, también hay muchos productos traídos de otras partes de España.
Como puedes ver, pasar unos días en Altea de vacaciones es una opción muy interesante en cualquier época del año. La posibilidad de comprar en mercadillos como los que te hemos mencionado te acercarán mucho más a las costumbres mediterráneas y es una actividad perfecta para combinarla con las playas y el sol. Además, te permitirán conocer de primera mano el porqué de la buena reputación de la dieta mediterránea.
Si quieres disfrutar de un alojamiento en Altea en cualquier momento del año, te invitamos a echarle un ojo a nuestras villas en Altea de alquiler. En unos pocos clics podrás hacer una reserva que se ajuste a tus gustos y necesidades.
Si necesitas ayuda, no dudes en contactar con nosotros por cualquiera de los canales disponibles en nuestra sección de contacto.
Avda de la Marina 318, 03720 Benissa (Alicante) Buzón 01529
Instagram
Youtube
Facebook